Llamados a ser santos

Llamados a ser santos
“Todos estamos llamados a la santidad, y sólo los santos pueden renovar la humanidad.” (San Juan Pablo II).

jueves, 12 de febrero de 2009

El arte de la oración y la pedagogía de la santidad


En la en la catequesis del 28 de marzo de 2001 el Siervo de Dios Juan Pablo II nos decía:
“En la carta apostólica Novo millennio ineunte expresé el deseo de que la Iglesia se distinga cada vez más en el "arte de la oración", aprendiéndolo siempre de nuevo de los labios mismos del divino Maestro (cf. n. 32), compromiso que ha de vivirse sobre todo en la liturgia, fuente y cumbre de la vida eclesial.”

Y en la carta apostólica citada leemos “Nuestras comunidades cristianas tienen que llegar a ser auténticas « escuelas de oración », (33) donde el encuentro con Cristo no se exprese solamente en petición de ayuda, sino también en acción de gracias, alabanza, adoración, contemplación, escucha y viveza de afecto hasta el « arrebato» del corazón”[…] “ Es preciso aprender a orar” … como los primeros discípulos: « Señor, enséñanos a orar » (Lc 11,1)” […] En la plegaria se desarrolla ese diálogo con Cristo que nos convierte en sus íntimos: « Permaneced en mí, como yo en vosotros » (Jn 15,4). Esta reciprocidad es el fundamento mismo, el alma de la vida cristiana y una condición para toda vida pastoral auténtica“[…] “Una oración intensa, pues, que sin embargo no aparta del compromiso en la historia: abriendo el corazón al amor de Dios, lo abre también al amor de los hermanos, y nos hace capaces de construir la historia según el designio de Dios”.

En la misma carta apostólica (32) Juan Pablo II subraya la importancia de la oración en la pedagogía de la santidad, recordándonos que esa “ « vocación universal a la santidad » ese « alto grado » de la vida cristiana ordinaria” ese “don de santidad” personal que se da a cada bautizado” hay que descubrirlo. Y agrega - “También es evidente que los caminos de la santidad son personales y exigen una pedagogía de la santidad verdadera y propia, que sea capaz de adaptarse a los ritmos de cada persona” y “para esta pedagogía de la santidad es necesario un cristianismo que se distinga ante todo en el arte de la oración”

2 comentarios:

Unknown dijo...

Pedagogía de la santidad: enseñar y ser enseñados en un proceso de santidad que es la perfección de la caridad y que tiens su alimento en una permanente vida de oración. Contar con un "camino" de santidad teniendo como base un proyecto de evangelización integral que es la vida en Cristo

Ludmila Hribar dijo...

Gracias Zaqueo por la visita. No tengo nada que agregar a tus palabras, un concepto perfecto. Estoy convencida que la oracion es la savia de nuestra vida y el medio para seguir transitando nuestro camino co todas sus luces y sombras. Muchas gracias.