(vuelvo
a publicar esta inolvidable homilía de Don Jozef Bart, ordenado sacerdote el 25 de mayo de 1986 por
Juan Pablo II, Rector de la Iglesia Santo Spirito in Sassia, https://www.divinamisericordia.it/
Roma, Director del Centro de Espiritualidad de la
Divina Misericordia y nombrado Misionero de la Divina Misericordia por el Papa
Benedicto en 2018).
Traducción de la homilía de Don Jozef Bart del 30 de abril de 2011,
Vigilia del Domingo de la Divina Misericordia y de la Ceremonia de
beatificación del Siervo de Dios Juan Pablo II. Soy consciente que esta homilía hay que
escucharla, no leerla, porque la fuerza del espíritu de Don Bart, su
convicción, contagia a quien le escucha.
No obstante aquí esta traducida, de la mejor manera posible. He puesto el mayor
de los cuidados por serle fiel al texto original resaltando en negrita las
frases donde Don Bart pone mayor énfasis.
"La Divina Misericordia es la llave que abre las puertas.
Cuantos periodistas me han preguntado estos días: Padre
pero que cosa es esta Divina Misericordia? Que cosa es esta Divina
Misericordia? Y a la pregunta que cosa es esto, yo respondo y digo: Quien es Misericordia? Jesús! No
que cosa, sino Quien? Jesús es Misericordia encarnada. Y
cuando nos fue dada esta imagen en estos tiempos, si en estos tiempos, porque
fue en 1931 cuando el 22 de febrero inicia la maravillosa y fascinante historia
de esta imagen. Yo en esta imagen represento mi Misericordia, de alguna manera la podemos tocar, la
podemos invocar, y hoy la podemos celebrar públicamente y firmemente
establecida gracias a Juan Pablo II, gracias a El, gracias a El. Humildemente,
pero con tanta fe, con tanta convicción y sabiduría ya de niño, de joven la
invocaba, le rezaba y verdaderamente podía conmoverse, no sentimentalmente,
bueno esta bien también de esta manera porque somos todos humanos…
conmoviéndose hasta sus fibras más íntimas el 17 de agosto del 2002 cuando,
curvado allí en el Santuario de la nueva Basílica de Cracovia, al consagrar la
humanidad a la Divina Misericordia decía quien hubiese pensado que aquel hombre
en zuecos, que hace tanto tiempo invocaba allí a la Misericordia haría la
consagración de toda la humanidad de pontífice. Si, los designios de Dios son
extraordinarios pero hace falta abrir……abrir
que cosa? Abrir nuestro ser a
todo aquello que Dios pide de nosotros. Y créanme es fascinante la
confianza de Sor Faustina en el Señor cuando dice Señor haz de mi aquello que tu quieres, haz de mi lo que tu quieres, si
tu quieres que sea crucificada sobre una cruz, esta bien, si quieres que
sea apedreada, esta bien, de aquí en mas quiero andar por tus caminos, según tu
entendimiento. porque lo que tu
quieres siempre será expresión de amor y misericordia hacia los
hombres.
Una gran santidad, si verdaderamente ella ha querido convertirse en una
grandisima santa y nuevamente no por casualidad, porque también Benedicto XVI
ha dicho al inicio de su pontificado nada es casual, nada, todo tiene su
sentido por eso nuestro único deber es cumplir en nuestro programa la voluntad
de Dios. No es casual que la Iglesia la haya canonizado precisamente el 30 de
abril del 2000, la primera santa del Gran Jubileo y debo decirlo, debo decir que a tantos se les ha
pasado por alto esta noticia, esta verdad, estos días, estos meses
cantidades interminables de libros que se imprimen en todas las lenguas sobre
el papa, todo aquello que hizo, etc. etc. Pero casi ninguno, en realidad ninguno de esos libros que me
fueron ofrecidos a mi – y esto también se lo he aclarado a los reporteros de la
TV instalada afuera - hacen referencia a las palabras de Juan Pablo II aquel 30
de abril, porque se trataba de una frase “este segundo domingo de Pascua, a
partir de ahora en toda la Iglesia se designará con el nombre de "domingo
de la Misericordia divina. Porque esta misericordia irradia precisamente de la
liturgia de este segundo domingo de pascua. Todo, sin embargo confluye allí,
era un inicio, precisamente un inicio, porque era un secreto oculto en el
corazón de Karol Wojtyla que fue desvelando poco
a poco, como siempre en modo diría sencillo, pero con tanta fe. Decía en una de
las parroquias romanas: yo que provengo de Polonia, yo que provengo de la
experiencia fuerte de Faustina Kowalska, he sentido, apenas electo pontífice,
una propuesta en el corazón, una inspiración: tu no puedes - decía el papa a esta parroquia - no puedes no dejar al mundo los
escritos, el mensaje sobre la Misericordia, y así - decía el Papa - surgió mi
encíclica Dives in Misericordia. Y cuando después siguió avanzando, avanzando
siempre, porque también él como todos nosotros, sacerdotes, obispos, todos
seguimos el camino del crecimiento, por eso oramos, hacemos nuestros retiros,
nos actualizamos, también el ha pasado por su crecimiento, en este culto
indudablemente, porque cuando el Papa beatificó a Faustina por cierto se
maravillo y dijo es extraordinario como este Jesús Misericordioso conquista los
corazones humanos. El Papa se ha maravillado,
maravillado y además debo decir esto, porque ningún reportero puede decirlo en
cambio yo si, pero lo digo con humildad, porque resulta que en 1999 cuando aquí
en San Pedro celebramos con 40.000 fieles y mas de 200 sacerdotes una
concelebración de que? De la
Fiesta de la Divina Misericordia no oficial celebraba, presidía… al estar de
gira por Italia todos me preguntaban el papa celebrará? Y yo les respondía pero
porque preguntan si el papa celebrara si estáis por allí venid porque en la
plaza San Pedro debe presidir el Papa, pero no lo ha dicho. El Papa se mostró
humilde, pequeño y dijo si a esta celebración presidida por nuestro cardenal
titular Fiorenzo Angelini, único cardenal romano, quien quedo por cierto sorprendido, conmovido interiormente viendo
40.000 personas y 200 sacerdotes en concelebración para celebrar la fiesta no
oficial de la Divina Misericordia y cuando el Papa se asomo para el Regina
Caeli - y - bien pocos lo saben o casi nadie - pero es bueno decirlo – allí en
el balcón de bendiciones Urbi et Orbi estaba expuesta la imagen de la Divina
Misericordia. El Papa dijo en aquel Regina Caeli hoy estamos pregustando la
vigilia del año jubilar. Y cuando después de la Misa me llamó, me dijo esta es la victoria y el triunfo de la
Divina Misericordia. Este es el triunfo de la Divina Misericordia.Han
venido, porque verdaderamente quieren, los fieles, piden, tienen necesidad de
invocar a esta Misericordia, han venido porque el mundo necesita de la Divina
Misericordia y me piden que apruebe este culto, este Domingo de la Divina
Misericordia y después cuando el 17 de agosto del 2002 en su ultimo viaje a
Polonia - no sentimental como han escrito algunos pobres reporteros -
verdaderamente. Juan Pablo II era muy bueno pero también severo y a algunos
este pastor les dijo que también podía pastorear a algunos reporteros. El fue
siempre apóstol en su pensamiento, nunca desubicado y porque el papa envejecía
decían que iba a despedirse de los suyos. Sin embargo el fue a Polonia en su
ultimo viaje porque precisamente desde allí nombro a Cracovia la capital del culto a la Divina Misericordia y
precisamente de allí ha querido enviar al mundo su mensaje a la iglesia y al
mundo de aquel viaje apostólico suyo llamado Dios rico en misericordia. Si,
queridos hermanos desde aquel lugar el Papa dijo: hay tanto sufrimiento en el
mundo y de este mundo que sufre parece alzarse el grito a la misericordia de
Dios. Si, Dios ha encontrado diría yo una chispa en una simple religiosa
Faustina, llamada religiosa de segundo coro, y ha encontrado un hombre fuerte
un buen trabajador de su viña porque el Señor lo ha visto digno como cristiano,
después como sacerdote, después como obispo y después llamándolo a guiar esta
barca en un tiempo entre el 2do y el 3er milenio y el ha tenido el honroso
deber de entregar a una humanidad - en situación difícil entre una guerra
nuclear que podía explotar entre las dos grandes superpotencias entonces en
conflicto en aquel tiempo entre la Unión Soviética y los Estados Unidos, y -
entre el aborto cuando fue aprobado aquí en Italia con un referéndum lo
sabemos, sobre el divorcio, el aborto; las sombras que habían aparecido en la
Iglesia misma, apenas asumido su pontificado - por cierto no era una situación
fácil pero el en su corazón albergaba algo grande, tenia la llave como el
decía para abrir las puertas de
la Divina Misericordia. Con esta
llave el Papa ha sabido abrir el corazón de ateos y alejados….Por medio de esta
llave hace 25 años ha sabido reunir a todas las religiones para invocar la paz
y la paz no se encontrara jamás como ha recordado Faustina Kowalska en su
experiencia hasta que la humanidad no encomiende con confianza a la
misericordia divina. Si la Divina Misericordia era aquel lazo que atravesaba
los días del Papa Wojtyla, el se aferraba todos los días a esta Misericordia -
ya antes de salir aquel 16 de octubre por la tarde al balcón para asomarse a la
gente - , porque lo dijo él en el 2003 cuando celebraba los 25 años de su
pontificado y distribuía en
la Plaza las estampas firmadas por el de la imagen que veis allí en la fachada
de nuestra Iglesia: él bajo Jesús Misericordioso. Si, - decía - he tenido
miedo, pero la confianza en la Divina Misericordia me ha dado la fuerza. El vio en esta Misericordia la fuerza,
por eso para tender puentes antes de morir, en su ultimo libro, decía la misericordia es la fuerza para detener
aquel misterio del mal que ataca a todos, ataca a sacerdotes, ataca a
religiosos, ataca familias, ataca niños, a todos y hoy se posesiona también de
los medios de comunicación y de las computadoras, lo sabemos, es como un tumor,
y hace sufrir a tantos pero la Divina
Misericordia es la fuerza, es el limite divino contra el mal. También lo ha reiterado el Papa Benedicto con mas vigor
aun en su verdad de teólogo, lo decimos con fuerza, el Papa Benedicto
ha dicho que la misericordia es el limite divino contra el mal se entiende ahora y se entienden bajo
esta luz las palabras fuertes inscriptas por Faustina Kowalska que dice que
Satanás odia a la Divina Misericordia, la odia con todas sus fuerzas, pero el
culto de la Divina Misericordia se impondrá en todas las almas no en una posesión diabólica, en una
posesión misericordiosa de Dios
sobre nosotros porque nosotros somos suyos, y el es nuestro por eso
Abba, Padre se dirigía Jesús y nosotros nos dirigimos hoy a el Padre rico en Misericordia y
también los jóvenes se han dirigido al Papa llamándolo papá, tu eres nuestro
padre.Si queridos hermanos el Papa JPII muriendo en la vigilia de la Divina
Misericordia por cierto no podía entrar en el Paraíso si no fuese el Domingo de
la Divina Misericordia y cuando los cardenales mañana pasen cerca de allí por
el altar – donde hay un gran escrito que he visto esta mañana con palabras de
Benedicto XVI sed felices de esto, sed felices quien lo ha amado, quien le ha
estado cerca, porque este Papa será beato el dia de la Divina Misericordia -
porque hoy, mañana con la beatificación de JPII tantos corazones recibirán una
nueva luz, aquellos que aun se oponían a esta misericordia, aquello que aun
dudaban, aquellos que aun tenían miedo o aquellos que reducían este culto de la
divina misericordia a un culto polaco, a una devocioncita, en cambio no, en
cambio no, mañana los dos
pontífices Benedicto y Juan Pablo PII hablarán porque mañana todos sentiremos su voz desde el
cielo que continua atrayendo almas por medio de su magisterio , el continúa y
continuará hablándonos de la Divina Misericordia. Y también su Polonia, su
Polonia que gracias precisamente a su fiel secretario el cardenal Stanislaw
Dziwisz su fiel secretario que ha emprendido esta gran responsabilidad a ejemplo de Juan Pablo II porque don
Stanislaw ha visto en este
pontífice como vibraba en su corazón la Divina Misericordia, en su
vida, en su misión, en su donación
de su cuerpo y su sangre por la Iglesia y por el mundo y hoy en la
Capital del culto a la Divina Misericordia el cardenal Stanislaw continuara,
inmediatamente después de la beatificación la gran
peregrinación de la imagen de Jesús Misericordioso y de las reliquias
de JPII que pasaran por todas las parroquias
y diócesis para llevar esta nueva luz, para llevar esta fuerza a todos porque es tan
fácil caer, es tan fácil prestarle oído a voces falsas , es tan fácil decir no
la practico mas….pero si seguimos este camino nosotros no somos hijos
espirituales de JPII porque el nos dijo abrid las puertas a Cristo, el nos ha pedido comprender esta
misericordia y concluyo precisamente así con las ultimas palabras escritas, no
dichas, dichas por Mons. Sandri, hoy cardenal, concluyo con las ultimas
palabras que JPII ha preparado para la Fiesta de la Divina Misericordia el 3 de
abril de 2005 y eran estas, así concluye su magisterio: Cuanto necesita el mundo
de comprender y acoger la Divina Misericordia! Es un mensaje, es un testamento
que el Papa nos ha dejado y con su beatificación, con su santidad nos sacude
profundamente para impulsarnos precisamente a comprender esta misericordia y
acogerla. Y esto queridos hermanos debe ser y yo sobre esto insistiré siempre
hasta que viva, debe ser ser el fruto de esta beatificación y la futura
canonización: comprender - porque no es fácil - la Divina Misericordia que se
ha consumado en la Pasión, Muerte y Resurrección y como segunda parte quizás
aun mas difícil acogerla e introducirla en nuestra vida. Ahora veamos el
pontificado de Juan Pablo II en la encíclica de la Divina Misericordia el papa
nos dice que es un deber grave de la iglesia de toda época en todos los tiempos
implorar esta Misericordia, proclamarla e introducirla en la vida. Pido esto
para los sacerdotes aquí presentes, para ustedes para que podamos
verdaderamente invocarla, celebrarla proclamarla y cumplirla, entonces si
seremos verdaderos, auténticos apóstoles de la Divina Misericordia. Alabado sea Jesucristo. ”