«Dios
es espíritu, y los adoradores verdaderos adoraran al Padre en espíritu y en
verdad (Jesus).» Nuestra idea de la espiritualidad de Dios se forma a partir de
las pobres experiencias de la propia espiritualidad del hombre. Una realidad «puramente»
espiritual y «puramente» personal al mismo tiempo. Espíritu es el Padre y el Hijo
y el Espíritu Santo. «El Espíritu todo
lo sondea, hasta las profundidades de Dios.» Ssabemos que Él es santo, que es
persona como el Padre y el Hijo. Sabemos que del Padre y del Hijo «procede»
como amor. Dios es amor. El Espíritu
Santo es el amor del Padre y del Hijo. Por eso precisamente es santo, porque la
santidad consiste en el amor. Su «procedencia» del Padre y del Hijo es al mismo
tiempo su perseverancia en la verdad del Padre y del Hijo y – en cierto modo –
la constitución de esa unidad (communio).
Aquí pasamos ya de la «Trinitas theologica» a la «Trinitas oeconoica»: la actividad de las personas divinas en la obra de la salvación del hombre. El Espíritu Santo – por la Pasión y muerte del Hijo – se hace don para las almas: El Espíritu de verdad os guiará hasta la verdad completa, el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos ha sido dado. El Espíritu Santo es fuente de la santidad del hombre, y la santidad consiste en la verdad y el amor. En ellos se manifiesta la misma esencia de la «espiritualidad» y de la santidad, también a nivel del hombre. En cierto sentido sabemos más por la Revelación acerca del Espíritu Santo en el orden «económico» que en el orden «teológico». Sin embargo, también en el orden económico, es Deusabsconditus,. Mientras que el Hijo-Cristo constituye la «visibilidad» de Dios y su «historicidad», el Espíritu Santo nos introduce de nuevo en su« invisibilidad». Y eso siendo El ante todo acción eficacia, fructificación, sin entrar en el ámbito de nuestra visión. Su acción en el alma, tan eficaz y fundamental, es siempre acción del Invisible en lo invisible.
Karol
Wojtyla Juan Pablo II Estoy en tus manos Cuadernos personales 1962-2003,
p.128/130, Grupo Editorial Planeta, 2014
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