Llamados a ser santos

Llamados a ser santos
“Todos estamos llamados a la santidad, y sólo los santos pueden renovar la humanidad.” (San Juan Pablo II).

jueves, 14 de agosto de 2025

San Maximiliano Maria Kolbe

 


Hoy 14 de agosto, recordamos a San Maximiliano Maria Kolbe, significativamente en la vigilia de la Fiesta de la Asunción de la Virgen Maria, aniversario de su muerte, “sacrificio de amor, que dió su vida en el campo de concentración de Auschwitz, ofreciéndose por otro prisionero al que no conocía, un padre de familia!” (Juan Pablo II: ¡Levantaos, Vamos!)

Kolbe, un santo que “como pocos, había sido penetrado por el misterio de la divina elección de María. Su corazón y su pensamiento se concentraron de forma particular en torno al «nuevo comienzo», que fue en la historia de la humanidad –por obra del Redentor– la Inmaculada Concepción de la Madre de su encarnación terrena.

«El significado de Madre –escribía– lo sabemos, pero el de Madre de Dios no lo podemos comprender con la inteligencia, con la mente limitada. Sólo Dios mismo comprende perfectamente qué significa “Inmaculada”... La Inmaculada Concepción está llena de misterios consoladores» (M. Kolbe, Carta del 12 de abril de 1933).

Maximiliano Kolbe penetró en este misterio de forma particularmente profunda, particularmente sintética: no de forma abstracta, sino a través del vivo contexto de Dios-Trinidad, Dios que es el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, y a través del vivo contexto de los designios salvíficos de Dios para el mundo. Escuchemos de nuevo sus palabras: «Busquemos cada vez más, cada día más, acercarnos a la Inmaculada; de este modo nos acercaremos cada vez más al Sacratísimo Corazón de Jesús, a Dios Padre, a toda la Santísima Trinidad, porque ninguna criatura está tan cercana a Dios como la Inmaculada. Así acercaremos también todos los que nos son cercanos en el corazón a la Inmaculada y al buen Dios» (M. Kolbe, Carta desde Nagasaki, 6 de abril de 1934). (de la homilia de Juan Pablo II en Niepokalanów, la Ciudad de la Inmaculada, complejo fundado por el P. Kolbe en 1927, Niepokalanów ese lugar donde, en continua obediencia al Espíritu de verdad, a ejemplo de la Inmaculada, el hombre se iba formando día a día, de manera que el Santo superase al hombre no sólo en función de la vida y del apostolado, sino también en función de una muerte de mártir «por el hermano»”.


Maximiliano Maria Kolbe fue beatificado por el Santo Padre Paolo VI el 17 de octubre de 1971, en presencia del hombre a quien Kolbe le habia salvado la vida, y del Cardenal Karol Wojtyla.

 


D
efinido por el Papa Pablo VI como un "mártir del amor", Kolbe ofreció su vida a cambio de un padre de familia, Franciszek Gajowniczek, que más tarde recordaría aquellos dramáticos momentos con estas palabras: "Kolbe se salió de la fila, arriesgándose a morir al instante, para pedir al Lagerfhurer que me sustituyera. Era impensable que la propuesta fuera aceptada, de hecho era mucho más probable que el sacerdote se sumara a los diez seleccionados para morir juntos de hambre y sed. ¡Pero no! En contra del reglamento, Kolbe me salvó la vida".

Maximiliano Maria Kolbe fue proclamado santo y mártir el 10 de octubre de 1982 por Juan Pablo II, en presencia del hombre a quien le habia salvado la vida.

San Maximiliano Kolbe, patrono de los radioaficionados




 

 

No hay comentarios: