"Yo te bendigo, Padre, (...) porque
has ocultado estas cosas a los sabios e inteligentes, y se las has revelado a
los pequeños" (Mt 11, 25). Con estas palabras, amados
hermanos y hermanas, Jesús alaba los designios del Padre celestial; sabe que
nadie puede ir a él si el Padre no lo atrae (cf. Jn 6, 44),
por eso alaba este designio y lo acepta filialmente: "Sí, Padre, pues tal
ha sido tu beneplácito" (Mt 11, 26). Has querido abrir el
Reino a los pequeños.
Por
designio divino, "una mujer vestida del sol" (Ap 12, 1)
vino del cielo a esta tierra en búsqueda de los pequeños privilegiados del
Padre. Les habla con voz y corazón de madre: los invita a ofrecerse como
víctimas de reparación, mostrándose dispuesta a guiarlos con seguridad hasta
Dios. Entonces, de sus manos maternas salió una luz que los penetró
íntimamente, y se sintieron sumergidos en Dios, como cuando una persona
-explican ellos- se contempla en un espejo.
(…)
El mensaje de Fátima es
una llamada a la conversión, alertando a la humanidad para que no siga el juego
del "dragón", que, con su "cola", arrastró un tercio de las
estrellas del cielo y las precipitó sobre la tierra (cf. Ap 12,
4). La meta última del hombre es el cielo, su verdadera casa, donde el Padre
celestial, con su amor misericordioso, espera a todos.
Dios
quiere que nadie se pierda; por eso, hace dos mil años, envió a la tierra a su
Hijo, "a buscar y salvar lo que estaba perdido" (Lc 19,
10). Él nos ha salvado con su muerte en la cruz; ¡que nadie haga vana esa cruz!
Jesús murió y resucitó para ser "el primogénito entre muchos
hermanos" (Rm 8, 29).
Con
su solicitud materna, la santísima Virgen vino aquí, a Fátima, a pedir a los
hombres que "no ofendieran más a Dios, nuestro Señor, que ya ha sido muy
ofendido". Su dolor de madre la impulsa a hablar; está en juego el destino
de sus hijos. Por eso pedía a los pastorcitos: "Rezad, rezad mucho y haced
sacrificios por los pecadores, pues muchas almas van al infierno porque no hay
quien se sacrifique y pida por ellas".
VIAJE APOSTÓLICO A FÁTIMA
(12-13 MAYO 2000)
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