"¿Buscáis a Jesús el crucificado?" (Mt 28,
5).
¿Por qué habéis venido ahora? ¿Buscáis a Jesús el
crucificado?
(…)
"Nuestro hombre viejo ha sido crucificado con El, para que... no seamos más esclavos del pecado..." (Rom 6, 6),
porque nosotros nos consideramos "muertos al
pecado y vivos para Dios en Cristo Jesús" (ib., 6,
11); efectivamente:
"Porque su morir fue
un morir al pecado de una vez para siempre; y su vivir es un vivir para
Dios" (ib., 6, 10);
porque: "Por el bautismo fuimos sepultados con
El en la muerte, para que, así como Cristo fue despertado de entre los muertos por
la gloria del Padre, así también nosotros andemos en una vida
nueva" (ib., 6, 4);
porque: "Si nuestra existencia está unida a El en una muerte
como la suya, lo estará también en una resurrección como la suya" (ib., 6,
5);
porque creemos que "si hemos muerto con Cristo...,
también viviremos con El" (ib., 6, 8);
y porque creemos que "Cristo, una vez resucitado de entre los
muertos, ya no muere más; la muerte ya no tiene dominio sobre El" (ib., 6,
9).
Precisamente por esto estamos aquí.
Por esto velamos junto a su tumba.
Vela la Iglesia. Y vela el mundo.
La hora de la victoria de Cristo sobre la muerte es la hora
más grande de su historia.
(de la Homilía de Juan Pablo II Sabado Santo 1981)
FELIZ Y BENDECIDA PASCUA DE RESURRECCION!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario